jueves, 22 de mayo de 2008

Cómo te va?

El amigo Federico "Il Bambino", gloria periodística de Villa Crespo se mete para adentro y nos pregunta cómo nos va. La respuesta depende de lo que hayamos podido conseguir hasta el presente o de cómo nos vaya realmente.

¿Cómo te va?

-Bien, todo bien, ¿y vos?
-Bien, también, todo bien, por suerte.

Bien. Todo Bien. Por suerte. Respuestas que forman parte, al igual que esa pregunta - y sus variables como ¿cómo va todo? ¿cómo van tus cosas? ¿qué contás de bueno?, entre otras - de convenciones sociales, se entiende. Pero, ¿por qué esas respuestas cuando nos encontramos con gente que no entra dentro de las relaciones a las que tenemos que responder con las fórmulas de las convenciones sociales?

Por inercia - ¿será por inercia? - hacemos también esa pregunta a amigos, a pesar de que haya pasado mucho tiempo desde la última vez que lo vimos, sin miedo y casi sin conciencia de estar cayendo en la ligereza de una pregunta de rigor que lleva seguramente a una respuesta de rigor: -Todo bien, che.

Cuando tenemos un segundo más en el cruce, profundizamos sobre nuestro fuerte, y terminamos hablando sobre lo primero que nos define socialmente: el laburo, una vacación o alguna cosita nueva que tenemos. Pero parece difícil encontrarse casualmente con alguien e ir a cosas que seguro todos valoramos más como la familia, las relaciones, cómo estamos, el amor. ¿Por qué será?

¿Cuáles serán las razones para que arranquemos de esta manera la comunicación en un encuentro sorpresivo, o respondamos de esa forma y difícilmente salgamos a lo largo de la conversación de ese esquema? ¿El tiempo que no podemos perder? ¿Lo que no queremos mostrar? ¿Lo que queremos que vean de nosotros? ¿La incapacidad para decir?

Espero empezar a cambiar mi esquema comunicativo la próxima vez que me encuentre con un amigo. Me interesaría saber de verdad cómo está. Y yo contarle en serio cómo estoy.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ojo con este post porque corres el riesgo de que nadie se reconozca. que todos piensen que es la sociedad y no que somos nosotors.