lunes, 2 de junio de 2008

La sonrisa de papá


¿Alguna vez le pasó sobrestimado lector ver que una mina es atractiva pero tiene algún detalle que la hace extraña? No estoy hablando de 4 pezones ni de que le falte un brazo como seguramente estarán pensando Federico Guillermo lo primero y Matías Raúl lo segundo, sino que por ahí se va un poco de quijada pero para los costados, o tiene una napia medio sanmartiniana, o unas manos de yugoslavo que reciencito nomás terminó a paladas una fosa común, o cara de topo, o de equino ganador del Carlos Pellegrini. Usté sabe que por años me pregunté el porqué de este detalle descalabrador y hace poco encontré la respuesta. De ahí en más fue todo como en sexto sentido, uno empieza a ver para atrás y le va cerrando la cosa. Dice: “Claa… con razón la mina tiene los ojos mas juntos que mosca bizca, mirá lo que es el viejo, parece un jeroglífico la cara.” Me he vuelto tan astrato que sería imposible postear acá alguna de las minas que me vienen a la memoria, por eso vamos a los ejemplos que todos conocemos que estan un poco pasteurizados por la prensa pero sirven a los efetos. La número 1 y para muestra sobra un botón es la fotógrafa Cora Reutemann. Tiene la misma cara del padre. Si uno la cruza sola en un casino de Mónaco como me pasó a mí y no sabe quién es piensa “paaaajarito es hija de un Moai” pero conociendo al padre las caras matches. El segundo ehemplo reconocible es la Stella Mc Cartney, que además de diseñar ropa para Adidas entre otras marcas tiene la misma cara del marinerito gigante de los cazafantasmas que el genio (y gracias Paulo por la felicidad) del padre.

Pero, porqué ocurre este prodigio?

Científicos de la Universidad Estadual de Werkenfordshire admiten que simplemente hay un gen, por ejemplo el gen paterno que va a conformar una parte del carácter del bebé, que simplemente equivoca su camino y se ubica en el clúster donde iría el gen que tiene que conformar, por ejemplo, la pera. De ahí obtendremos por lógica, una pera con carácter. Del mismo modo, ese clúster vacío que no llenó el gen paterno del carácter lo puede llenar uno materno que tiene que ver con el ojo, entonces la persona ya adulta tendrá un espíritu muy observador, y así con lo que se les ocurra. De manera inversa, podemos encontrar también varones que se parecen a sus madres, entre los que podemos nombrar al Periodista Luis Ventura, a Julio Bocca, Fernando Niembro, a Mike Tyson y a Gabriela Sabatini entre otros. Seguro muchachos que ustedes conocen a una mina de esas eh? Piensen, busquen, hagan memoria y alguna van a encontrar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

briyante i ilarante